Koukyuu no Karasu

Entre la corte real, hay una persona tan temida como venerada: la Cuervo Consorte Ryuu Jusetsu. Residiendo en su palacio negro azabache y aislada del emperador, es objeto de innumerables rumores. Se dice que posee habilidades místicas y que puede satisfacer cualquier petición, desde encontrar objetos perdidos hasta infligir maldiciones. Algunos la llaman sabia inmortal, mientras que otros creen que es una terrorífica revenant. Pero estos comentarios no inquietan a Jusetsu, que prefiere pasar sus días en tranquila soledad. Hasta que el emperador Ka Koushun irrumpe en su corte y le pide ayuda con un misterioso caso. La petición del joven emperador obliga a Jusetsu a salir de su palacio por primera vez. A pesar de que las frecuentes visitas de Ka Koushun la molestan sobremanera, no se atreve a rechazarlo. Las enseñanzas de su predecesor resuenan en sus oídos: la Consorte del Cuervo está destinada a permanecer siempre sola y a no desear nunca nada. Sin embargo, Jusetsu establece el primero de varios vínculos cuando le pide a Jiujiu, una inocente y curiosa muchacha de la corte, que sea su única sirvienta. Juntas, comienzan a cumplir las peticiones de la gente de palacio. Sin embargo, peligros desconocidos acechan en el mundo exterior, y llamar la atención sobre sí misma puede llevar a Jusetsu a enfrentarse con un pasado que es mejor no perturbar.